Medio Oriente: Ayudar a las personas en Siria y Yemen, ejes del trabajo de ACNUR

Durante los últimos años, la guerra en Siria ha generado uno de los mayores desplazamientos de población que se recuerdan. En 2018, lejos de solucionarse, el conflicto armado dejaba algunos de los episodios más sangrientos, y a miles de personas en necesidad de ayuda humanitaria.

Dentro de Medio Oriente, Yemen se ha convertido en otra de las mayores crisis. En 2021, hubo varios de cientos de miles de nuevos desplazamientos dentro del país debido a “una de las peores” escaladas del conflicto observadas en los últimos años.

ACNUR trabaja para entregar refugios, agua, medicinas y alimentos a quienes se han visto afectados por guerras y conflictos en Medio Oriente.

Medio Oriente desestabilizado con los nuevos conflictos

Con más de 6,8 millones de refugiados, el conflicto de Siria, que ya lleva más de 11 años, sigue siendo el más grave de la región. Pero no es el único: 2,7 millones de personas han huido de Afganistán. Los acontecimientos que desembocaron en la toma de Kabul a manos de los talibanes en agosto de 2021 causaron desplazamientos dentro del país y también hacia países vecinos. El número de personas desplazadas internas aumentó por 15.º año consecutivo.

Otro de los países de Medio Oriente que lleva años inmerso en una guerra es Yemen, donde los combates han obligado a más de 4,3 millones de personas a huir a zonas más estables del país. Lo que supone un incremento del 7% con respecto al año anterior. La mayoría de los desplazados son niños y niñas.

Todos estos conflictos han hecho que Medio Oriente se haya convertido en una de las principales zonas de acogida de refugiados en el mundo. En el Líbano, una de cada 8 personas es refugiada. En su mayoría son sirias. Türkiye es el país del mundo que más refugiados acoge: Unos 3.8 millones. A ellos se suma Jordania, en donde una de cada 14 personas que habitan su suelo, son refugiadas.

“Siria es la mayor crisis humanitaria y de refugiados de nuestro tiempo. Una causa continua de sufrimiento para millones de personas que debería recibir una oleada de apoyo en todo el mundo»

Filippo Grandi, Alto Comisionado de ACNUR